Según Jhenifer Mojica, abogada de la Universidad Nacional de Colombia, subdirectora de la Comisión Colombiana de Juristas, Colombia es el país que más víctimas tiene como resultado de las amenazas y las agresiones a líderes sociales en el mundo,
Además de los daños a los derechos individuales, el asesinato de líderes sociales afecta los intereses colectivos y en última instancia al entero sistema democrático, pues desestimula que las personas se organicen para defender los intereses de sus comunidades, de acuerdo con el profesor Marcos Romero, de la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de Colombia y director de la ONG Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento (Codhes).