Rodolfo García, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) aseguró que con la entrada de las nuevas energías, finalmente “ se conoce el límite de las grandes hidroeléctricas”.
Para el experto, lo que fue un orgullo para Colombia en los años setenta y ochenta está avanzando y saliendo de su zona de confort. Atrás quedan las hidroeléctricas, porque, más allá del mercadeo y la responsabilidad social, viene una nueva economía basada en la energía solar a mejores precios.
Por su parte Germán Corredor, profesor del Departamento de Ingeniería Eléctrica y Electrónica de la UNAL, enfatiza en que “la energía solar ya está en todo el territorio, y finalmente la regulación ahora sí empieza a modernizarse”.
Con esto empieza a expandirse este tipo de energía a zonas más allá de La Guajira, Boyacá o el Huila, que es donde hay más radiación.